Comienza la segunda semana de mi experiencia de prácticas. Durante esta semana, como os comenté en la anterior entrada, realicé las rotaciones correspondientes por los grupos de 5º y 6º de educación primaria. En dichas rotaciones pude observar y analizar dos metodologías y formas de trabajo diferentes. En estos niveles superiores observé un alto conocimiento de la lengua inglesa, tanto desde una perspectiva teórica, como práctica.
Durante estos días, conocí a C. una chica que está realizando sus prácticas de cuarto curso en el centro escolar. Tras intercambiar algunas palabras y perspectivas, me comentó que estaba realizando un estudio para su Trabajo de Fin de Grado sobre el pensamiento computacional, por lo que me interesé mucho en cómo estaba realizando dicha investigación y si estaba llevando a cabo algún tipo de práctica relacionada con esto en el centro. Me comentó que en la hora de valores, juntaba al alumnado de 6º en una clase y aprovechaba para realizar ejercicios y actividades en la plataforma Scratch. En ese momento, no dudé en ofrecerle mi ayuda y unirme a su clase.
Scratch es un lenguaje de programación por bloques que permite al alumnado entender las nociones básicas de la programación, así como diferentes funciones y elementos que tiene esta. Además, es una buena herramienta para trabajar la resolución de problemas, la cooperación entre iguales y la competencia digital.
Además, tuve el placer de estar en una clase sobre expresión verbal y no verbal en la clase de 6º. Esta clase me fue de gran ayuda, pues el profesor expuso a la clase de forma magistral los cinco elementos básicos de la comunicación, ejemplificando y actuando todos y cada uno de ellos. A día de hoy, sigo recordando esa clase y reconociendo e implementando dichas técnicas que aprendí.
Ya el miércoles, comencé de nuevo en mi clase definitiva, en 2º B. Son muchos los niños y niñas que tenían ganas de que volviera con ellos a darles clase, tanto que me habían hecho unos corazones aprovechando que fue el día de San Valentín, pidiéndome que volviera a su clase. En mi opinión, este tipo de detalles suponen una motivación y aporte de energía extra a la figura docente, para preparar mejores clases, implicarse más en la educación de este alumnado, etc.
Para terminar la semana, llegó carnaval. En el colegio todo el alumnado había preparado durante las semanas previas un baile y sus respectivos disfraces, dentro de la temática del agua (Proyecto del centro). Podéis ver dichos bailes en la galería del CEIP Gregorio Marañón, en la página de la JCCM.
La clase de 2º se disfrazó de patos y creamos hasta un barco. Os dejo alguna foto por aquí y la canción que bailamos.
¡Nos vemos en clase!
Fuente de las imágenes:
M. haciendo un programa de persecución en Scratch: Elaboración propia.
Clase de 2º B en carnaval 2023: Elaboración propia.
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