Mi periodo en el colegio va llegando a su fin, pero no la ilusión y la energía que tenía el primer día.
Durante esta semana hemos visto diferentes formas de escritura según la cultura (latina, china, árabe...), así como diferentes códigos que nos permiten comunicarnos entre los humanos. Uno de ellos que nos llamó bastante la atención fue el braille. El alfabeto braille es un sistema que parte de seis puntos ubicados y numerados como se muestra a continuación.
La combinación de los puntos nos permite formar palabras y números.
Como nos gustó tanto escribir con código decidimos crear uno entre todos. Para ello, escribimos en la pizarra las letras y en nuestros cuadernos y, uno a uno fuimos saliendo a la pizarra a dibujar/escribir un símbolo que representara una letra en nuestro alfabeto. Después nos enviamos mensajes entre nosotros y ya veréis, porque lo utilizamos hasta para hacer una gymkhana.
Esta semana también pudimos disfrutar de un cuentacuentos, sobre la lectura. Aprovechando que el día del libro era el día 23 de abril, el cuento hablaba de diferentes tipos de bibliotecas que hay por el mundo, ¡No os podéis imaginar lo que aprendimos! ¿Sabías que hay en bibliotecas donde dejan pasar gatos? ¿Y que hay otras situadas en árboles, de cuyas ramas cuelgan libros? Como nos gustó la idea decidimos colocar un poco la biblioteca de nuestro aula y crear una para el recreo.
Por último, os queremos presentar a nuestro pulpo, que nos ayuda a aproximar números a la unidad, la decena y la centena y... hemos aprendido a entenderle.
Utilizando la siguiente plantilla, situamos el número que queramos aproximar en el centro y las centenas más próximas al número a los lados. Después nos fijamos en las decenas y vemos si el número está más cerca del número de la izquierda o de la derecha.
Además, hicimos un juego de aproximación en la pizarra en el que hacíamos lo mismo que con el pulpo, pero lo vimos mejor con los equipos rojo y verde. Tras practicarlo unas cuantas veces nos hemos convertido en expertos de la aproximación, nos costó un poco al principio pero nunca más se nos va a olvidar gracias a nuestro pulpo.
¡Nos vemos en clase!
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